Me gustaba subir al desván de mis abuelos, donde los trastos viejos acomulaban polvo, como solía decir mi madre. Pero según mi visión infantil, allí se escondían objetos extraordinarios y mágicos, el polvo era solo para despistar a los adultos y ahuyentarlos.
Me pasaba horas sentada en el suelo hurgando en las cajas. Los objetos en desuso aguardaban el cálido tacto de mis inocentes manos para adquirir vida y jugar conmigo. Todo volvía a su estado inerte si mi madre se presentaba de improviso. A los objetos no les debían gustar los adultos porque si no, no me lo explico…
¡Qué bonito! ¡Qué recuerdos! Buscábamos cosas nuevas y la sorpresa era que nos encontrábamos a nosotros mismos. Felicidades.
https://ernestocapuani.wordpress.com/
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Muchas gracias! 🙏😊 Me alegra que te haya gustado! Un saludo! ☺
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Es la pura realidad. Estoy convencido, a los adultos se les seca una parte del cerebro, precisamente la de la imaginación que otorga vida a los objetos que nos rodean, y la capacidad de hablar a plantas y anímales, no pienso dejar que eso me pase nunca. Un beso.
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Bien dicho! Yo tampoco! 😊Besooo
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Muy bonito, Lidia!! 😘😘😘😘
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Muchas gracias, Ana!! Espero qje los Reyes te traigan objetos de los que cobran vida!! 😉😘😘🌟💓
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Otro niño? Uy. Igual eso no iba aquí?😅😚
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😂😂 Tú siempre tan gracioso!!! 😉😘
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Hay cosas (y sensaciones) que sólo pueden ver y experimentar los niños. Y los animales. !Que los Reyes te traigan un saco lleno de esa mirada especial que tú pones en cada texto¡
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Muchas gracias, Yolanda!! Un placer recibir tus comentarios, con eso ya me siento obsequiada!!
Deseo que los Reyes te traigan esas cosas que no se pueden comprar!! 😊🌟😘
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Lo que me asombra de las recuerdos infantiles de los demas….son iguales que los míos y no dependen ni del lugar geográfico ni de de la cultura ,ni de la educación. Ese mundo único y común infantil y tantos mundos distintos de los adultos. Me encanta y me siento descepcionada..sentir lo mismo sin saber describirlo tan hermoso. Besos.
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Tienes razón, la inocencia e imaginación infantil no depende de la cultura o de la educación, es igual a todos. Pero se difumina hasta desaparecer a medida que pasan los años.
Me alegra que te guste, pero no te sientas decepcionada, eso me entristece. Tú lo expresarías diferente, ahí está lo bonito de la diversidad!! Un abrazo grande! 😊😘
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Gracias por animarme…en mi última entrada intenté dibujar algo parecido…pero nada que ver con lo tuyo. Y no creo que me falta el vocabulario.. estoy hecha de otra masa…me falta imaginacion y las palabras, por supuesto 😊,también 😥besos
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Me imagino que todo eso forma parte de ser niño y tal vez lo bueno sería seguir dando vida a muchas de esas cosas siendo adultos. Eso que llamamos inocencia también podría recibir el nombre de magia. Nosotros ya no somos tan inocentes pero creo firmemente que podemos seguir haciendo magia, aunque rodeados de prejuicios, tengamos que hacerla en nuestra soledad. Hermoso texto en un día también lleno de magia. Un abrazo
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Muchas gracias, Carlos!! 😊 Muy cierto, cuando nos hacemos adultos es como que viene en el lote el hecho de perder la inocencia y ya no creer en la magia. Pero yo soy de una forma que me niego a eso!! Soy una adulta que disfruta de la magia, la imaginación y de la inocencia (aunque los palos de la vida hacen que cada vez lo sea menos).
Un abrazo fuerte!! 😊🌟
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Reblogueó esto en rererebloguer.
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Siempre te puedes encontrar cosas inesperadas entre el polvo… Entre las mejores recuerdos bonitos.
Precioso 😘
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La mirada de la infancia es única. Bueno en realidad creo que cada etapa tiene una, lo que pasa es que la inocencia y el descubrimiento son partes esencialmente bonitas de la vida.
Yo, al igual que tú, me niego a perder la imaginación. De niña disfrutaba en el desván de mi abuela… y una vez me encontré un sorpreson… jajaj te pongo el enlace de la entrada que escribí el año pasado sobre el tema… por si te apetece curiosear.
https://micaminobuscandot.wordpress.com/2016/01/24/trastadas-de-ninos/
Besos 😘
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Jajaja Acabo de leer tus trastadas, Mukali!! La escena de la comunión, me pregunto a quién no le pasó tener un ataque de risa en plena ceremonia o sesión de catequesis?!?! Me he sentido identificada. No tanto con lo del desván de tu abuelo, sí por lo de querer abrir cajas por una curiosidad imperiosa que no se puede frenar (jajaja) pero no tuve ninguna experiencia similar en relación a revistas donde hombres y mujeres hacían cosas raras!!! 😂😂 Muy buenas trastadas, Mukali!!
Gracias por tu comentario. Un abrazo!! 😊😘
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Jajaja me alegro que te gustase, Lidia.
Un abrazo.
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Los adultos guardamos recuerdos para que futuros niños recreen la magia con la que una vez jugamos… Si no, ¿para qué existiría el altillo o el sótano en una casa?
Precioso relato, como siempre. Abrazo!
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Muchas gracias, Paula! 😊 La magia proviene de la mirada de un niño/a eso es lo que hace mágico todo lo que ve 😉
Un abrazo 😘
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Brillant! Molt tendre! M’has fet recordar quan de petit mirava amb curiositat coses antigues de casa, com un tocadiscs o un televisor. En una ocassió els meus pares decidiren fer neteja, perquè ja ens faltava espai. Aleshores, la meva mentalitat romàntica em portà a agafar eixes reliquies i pujar-les al terrat, amb la idea de que allí les protegiria. Estiguí uns dies anant al terrat a contemplar-les com si fossin tresors, tòtems o alguna cosa per l’estil, jajaja.
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Jajaja Quins bons records!! I és que de petits tot ho veiem diferent i coses que no tenien cap valor eren les més importants!! Un record molt bonic aquest que comparteixes!!
Gràcies, Javi!! Un abraçada 😊
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jajaja. No creguis que és sols perquè era petit. Si em tornés a passar això, tornaria a guardar eixes reliquies, jajaja.
Una forta abraçada de tornada, Lidia!
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Muy lindo lo que has escrito, Lidia. Creo que nunca has perdido la curiosidad de la niñez, y ello no solo te mantiene joven, sino que también plena de imaginación. ¡Felices tus alumnos con una profesora como tú y también nosotros que disfrutamos leyendo tus historias.
Un abrazo grande.
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No tengo palabras para agradecer tu comentario lleno de aprecio!! Muchas gracias, Saricarmen!! Como bien dices, la imaginación me mantiene joven (o es al revés? 😅). A mis alumnos les suelo leer mis relatos y muchas veces me lo piden ellos!! Están encantados y yo, más aun!!
De nuevo, gracias! Besos llenos de cariño!!
Por cierto, pudiste arreglar tu entrada de las luciérnagas?!
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¡Oh, sí! Ya sé lo que me pasó…fue la «viejez»…¡qué le vamos a hacer!
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Ahora mismo voy a leerlo!!
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¡Muy lindo!❤
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Muchas gracias!! 😊
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El desván es el lugar mágico
donde van los recuerdos a descansar,
se esconden en objetos y en prendas de vestir,
se muestran en cuadros y fotografías,
solo esperando una mano que,
iluminada por la magia, los haga revivir.
El desván o esa habitación de los trastos, o el sótano… lugares mágicos donde encontrar secretos, todavía hoy, cuando hace mucho que no reviso algún armario, siento el cosquilleo de encontrar algo que ya no recuerdo.
Un abrazo, Lidia.
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Sí, exacto! A ese cosquilleo me refiero!! Yo tampoco lo he perdido, de hecho estas Navidades convencí a mi madre de hacer «limpieza» del garaje donde había cajas que habían cogido polvo y quería ver que escondían!! Ella me decía: «son libros viejos, nada más». Pero me salí con la mía y, en efecto eran libros, pero entre los libros salieron unas láminas que yo pinté hace tiempo y la ilusión me embargó!! Esa sensación de búsqueda del tesoro!! Fue genial compartir, además esas horas con mi madre, charlando, rememorando… ay! (Suspiro)
No me enrrollo más… Un besazo, querida Estrella!! 😘 🌟
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Los adultos son unos aguafiestas. Eso está claro 😀
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Jajaja cierto es!! 😜
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Me gusta cuando a veces vemos a los adultos como si fueran otros, eso es que tenemos viva nuestra parte de niños.
Un abrazo,
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Cierto, Francisco! Yo intento mantener intacta mi niña interior. 😉 Un abrazo
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la inocencia de la niñez sólo es comprendida por los niños. Tu relato me trae a la memoria algunos pasajes que me habían quedado oxidados. Lo mejor de buscarte es encontrarme con lo mejor de tí.
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Me alegra transportarte a tu infancia 😊 Gracias por tus palabras, Mac! Un saludo 😀
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