El Libro

Ante mí se alzaba un edificio de piedra ennegrecida. La portalada, coronada por un arco de medio punto, estaba abierta. Crucé el umbral, expectante. El interior permanecía a oscuras y en silencio. Caminé hasta el altar, que estaba cubierto por un delicado paño de algodón blanco. Encima, reposaba El Libro junto a una vela encendida. En ese momento recordé, con cierta nostalgia, mis clases de introducción a la teología. 

@lidiacastro79

Entrada para el Reto 5 líneas (Junio ’16). Más información.

Licencia de Creative Commons
Mis historias y otros devaneos by Lídia Castro Navàs is licensed under a Creative Commons Reconocimiento-NoComercial-CompartirIgual 4.0 Internacional License